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Teniente general D. Antonio Ordóñez y Villanueva

Autor: Antonio Haro Camacho
Antonio Ordóñez y Villanueva nació en Algeciras el 12 de febrero de 1790. Hijo del Teniente General D. Juan Ordóñez, de glorioso recuerdo por sus hechos de armas en las guerras de África, Inglaterra, Francia y Portugal. Llevado desde pequeño del deseo de seguir por tan honrosa senda, tuvo D. Antonio Ordóñez entrada en el Regimiento de Infantería de Asturias, donde después de servir dos meses y veintidós días como cadete y subteniente de menor edad, desde el 20 de noviembre de 1801 empezó a contársele la antigüedad en el último empleo desde el 12 de febrero de 1802.
Paso a explicar a continuación algunos hechos de armas de D. Antonio Ordóñez en diversos en los inicios de su vida militar y en la Guerra de la Independencia:
Periodo 1804-1807: El 7 de agosto del primer año pasó en la misma clase al Regimiento de España y con el mismo y a las órdenes del general D. Francisco Javier Castaños, se halló en la salida extraordinaria que tuvo lugar el 15 de enero de 1805 en el Campo de Gibraltar, frente a cuya plaza estuvo veintiún días al raso. En julio del mismo año fue a acampar al frente de la misma, a la altura de Buena Vista, donde permaneció más de cuatro meses.
Periodo 1808-1809: Hallábase de Real Orden en Algeciras el joven oficial Ordóñez estudiando al lado de su padre, cuando por todos los ángulos de la península resonó el grito del Dos de mayo, llamando a la guerra contra las tropas francesas invasoras. Ordóñez solicitó entonces ser agregado a uno de los cuerpos que salían a campaña, por lo que el general Castaños le destinó al Batallón de Voluntarios de valencia, que pertenecía a la vanguardia del Ejército de Andalucía. Con su nuevo cuerpo se halló Ordóñez el 24 de junio en la acción de Arjonilla, arrojando de ella a los enemigos; el 30, en el reconocimiento del molino de Batusavio; el 10 de julio en el que se practicó destruyendo el puente de Marmolejo; el 15 en la acción de los Visos de Andujar; el 16 en el reconocimiento de los vados del mismo; y el 19 en la vanguardia persiguiendo al ejército francés hasta tomar parte en la Batalla de Bailén, cuya cruz disfrutó. El 27 de julio fue Ordóñez ascendido a teniente y continuando en las operaciones de este año se halló el 21 de noviembre, en el reconocimiento que se ejecutó, batiendo a los franceses en Olite y Tafalla; el 23 en la Batalla de Cascante; el 27 en el reconocimiento del Fresno y Puerto de Neveros; el 27 en la acción de Briviesca, sosteniendo en la vanguardia la retirada del ejército. El 28 de marzo de 1809 fue Ordóñez destinado a los Puertos de la Corredera y Venta de Cárdenas, para contener la dispersión de la acción de Ciudad Real y hacer frente a los enemigos; en el puente de Medellín los días 2, 6 y 8 de junio fue atacado particularmente; concurrió el 25 del mismo mes con el general Bassecour a la toma del puente del Arzobispo; el 28 al reconocimiento sobre Oropesa; el 9 de julio al de Aldeanueva de Barbarroya; el 11 del mismo mes a la defensa del ya citado puente del Arzobispo; el 21 al ataque de Calera; el 22 a la toma de Talavera, el 26 a la acción de Aldabón, sosteniendo el movimiento del ejército; el 27 al paso del puente del Alberche, y el 28 a la Batalla de Talavera, en la que combatió en el flanco derecho y siguió la vanguardia del ejército, sosteniendo su retirada, en la que a pesar del empeño de los franceses se pasó el puente del Arzobispo y se sostuvo la posición. Habiendo pasado con el mismo cuerpo al ejército del Centro, se encontró Ordóñez el 6 de agosto en los reconocimientos sobre Ocaña y Ontígola el 10 y 12 de noviembre, y el 19 del mismo en la desgraciada Batalla de Ocaña. Estuvo además empleado en las guerrillas, distinguiéndose en los encuentros que diariamente ocurrían. El 8 de septiembre fue ascendido a segundo capitán del mismo cuerpo.
Periodo 1810-1813: trasladado el 1 de septiembre de 1810, en clase de capitán primero a la compañía de Escopeteros del Campo de Gibraltar, se halló el 11 de enero de 1811 en la sorpresa de Medina Sidonia; el 5 de marzo en la Batalla de los pinares de Chiclana; el 8 y 9 del mismo mes, rechazando los ataques que dieron los franceses a Medina Sidonia; el 23 de junio en los sangrientos ataques de la derecha de gaena, término de Morón, por cuya acción se le agració con el grado de teniente coronel de Infantería; el 19 de septiembre en los campos de Alcalá y el 25 en las peñas de Juana Sánchez, en los montes de Jimena. El general en jefe del 4º Ejército, D. Francisco Ballesteros, encargó a Ordóñez el mando del Puerto de Ubrique, donde fue atacado el 6 de octubre por una división francesa. Ordóñez sostuvo entonces la retirada con el mayor orden, hasta unirse al grueso del ejército que se hallaba en San Roque, sin pérdida alguna, por lo que recibió las gracias del mencionado general. El 1 de enero de 1812 fue nombrado ayudante del general Ballesteros, siendo repetidamente comisionado para hacer reconocimiento sobre la línea enemiga, que sirvieron de gran utilidad para emprender los movimientos del ejército. En la acción del 2 de febrero en la población de Prado del Rey, el general en jefe le ordenó dar dirección al primer Batallón de Cataluña, con el que logró desalojar a los franceses que estaban posesionados del pueblo. El 12 del mismo mes se halló en el reconocimiento de la casa fuerte de Alhaurín y, el 14, en la acción de Cártama. Volvió a encargarse Ordóñez, el 20 de junio, del mando de su compañía, con la que estuvo guarneciendo la Isla Verde y Algeciras. En julio pasó de guarnición a la plaza de Tarifa, y desde aquí, de comandante principal de la línea de Gibraltar, donde permaneció hasta diciembre. En 1813, declarada en este año la epidemia de la plaza de Gibraltar, solicitó Ordóñez del Comandante general D. José Alós de Villavicencio, el pasar voluntariamente con su compañía a establecer el cordón sanitario de la línea, lo que le fue concedido, confiriéndosele el mando principal del cordón.
Realizando un gran salto en el tiempo nos vamos a 1844, cuando el 4 de junio D. Antonio Ordóñez es nombrado Gobernador de la plaza de Ceuta. El 13 de junio de 1848 presentó la dimisión de los anteriores destinos, siendo nombrado el 17 de noviembre Gobernador de Cádiz. En 1850, por Real decreto del 12 de noviembre, fue nombrado Capitán General de Canarias, hasta que por Real orden del 4 de mayo de 1852 se sirvió S.M. relevarle de este cargo, quedando muy satisfecha del celo, lealtad e inteligencia con la que lo había desempeñado. El teniente General D. Antonio Ordóñez fue condecorado con las Grandes cruces de San Hermenegildo, de Carlos III y de Isabel la Católica; con el Cordón de San Mauricio, de San Lázaro de Cerdeña, de Bailén, Talavera, Chiclana y del Tercer Ejército.
Según sus biógrafos “su modestia no ha permitido que se amplíe la parte relativa a los años 1820-1823 y de 1830 a 1836, periodos en los que prestó señalados servicios, que según sus palabras, deben darse al olvido, porque siempre son de lamentar las disensiones entre ¡Españoles!”.

1 comentario:

  1. quisiera saber un poco más de este personaje, aunque he leido mucho de la guerra de la independencia, no sabia que tenía un paisano tan famoso me gusta este blog saludos

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